Tras participar en una manifestación, no se supo más nada de su persona. El país se moviliza, en un clima complejo.
Las complejidades de la investigación sobre la desaparición del joven Santiago Maldonado, que fue parte de una manifestación en Esquel, el 1º de agosto pasado, quedarán al margen este viernes, cuando la sociedad se movilice pidiendo por su aparición.
Las marchas ocurrirán en todo el país, con la convocatoria en Plaza de Mayo, de Buenos Aires, como epicentro. En la capital cordobesa, la convocatoria de la Mesa de Trabajo por los Derechos Humanos cita a quienes se sumen al pedido para esta tarde a las 18:00, con partida en la esquina de Avenida Colón y General Paz.
Después de mas de treinta días sin que se conozcan datos del paradero del joven bonaerense, el mayor reclamo es hacia el Gobierno nacional, ya que varios testigos en la causa afirman que no se supo más de él después de un operativo de la Gendarmería Nacional.
Las vacilaciones, demoras y falta de respuestas de funcionarios generó desconcierto. Mientras, ayer el Ministro de Justicia, Germán Garavano, pidió “calma” ante una gran cantidad de versiones que dejan trascender medios a nivel nacional.
El contexto también resulta complejo, por las recurrentes denuncias de “persecución” de organizaciones sociales y políticas, con el caso latente de los allanamientos en quince sedes producidas este jueves en la ciudad de Córdoba.
Un botón de muestra que exhiben en este contexto es a diputados oficialistas solicitando, en declaraciones públicas, una normativa “contra los encapuchados” en marcha y movilizaciones.