Se realizaron en todo el país en repudio a la sentencia que benefició a un represor. El acto principal fue en Plaza de Mayo, donde se leyó un documento.
En Plaza de Mayo, organismos de derechos humanos repudiaron este miércoles a la tarde el fallo de la Corte Suprema que avaló el 2×1 para represores y afirmaron que no quieren «convivir con los asesinos más sangrientos de la historia argentina».
Una representante de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida, fue la encargada de leer el inicio del documento de consenso de los diferentes organismos de derechos humanos, que convocaron a marchar a la Plaza de Mayo en contra de la decisión del máximo tribunal del país.
«Nunca más privilegios a los criminales de lesa humanidad. Nunca más terrorismo de Estado. Nunca más genocidas sueltos. Nunca más el silencio. No queremos convivir con los asesinos más sangrientos de la historia argentina ni que nuestros hijos ni las futuras generaciones tengan que hacerlo», subrayaron las agrupaciones, ante una multitudinaria movilización.
El documento también señaló que el fallo «que benefició con el 2×1 al genocida Luis Muiña abrió la puerta a la impunidad».
En el lugar, estuvieron los principales líderes de las organizaciones sociales y de derechos humanos que promovieron la movilización.
Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, se refirió al acto y aclaró que «no es una marcha en contra del Gobierno», aunque no descartó una posible responsabilidad del Ejecutivo por el fallo: «Puede ser. No tengo pruebas, pero tampoco lo descarto».
«No es una marcha en contra del Gobierno. Para hablar en contra del Gobierno, lo hacemos mirando a los ojos al Presidente, no desde una tribuna», explicó en declaraciones televisivas.
Al acto de repudio bajo la consigna «Señores jueces: Nunca Más», convocado por Abuelas, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas, entre una docena de organizaciones, se sumaron los partidos de izquierda que integran el Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT) y el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) y que están nucleados en el Encuentro Memoria Verdad y Justicia.
El repudio en el país
La marcha central en Plaza de Mayo tuvo réplicas en numerosas localidades del país, donde también organizaciones de derechos humanos, sociales, sindicales y políticas locales se pronunciaron en rechazo al fallo de la Corte.
Un gran número de organismos de derechos humanos, sociales, sindicales, políticos y estudiantiles de La Plata marcharon hacia la ciudad de Buenos Aires para sumarse a la manifestación en Plaza de Mayo.
En Mar del Plata, también hubo una marcha de organismos de derechos humanos, desde la Cámara Federal local (Diagonal Pueyrredon 3138), hasta el Tribunal Federal Oral, en avenida Luro 2455.
También en Bahía Blanca diversas organizaciones se concentraron frente a la sede de la Unidad Fiscal para Delitos de Lesa Humanidad, Sarmiento 173, en el centro de la ciudad.
En Neuquén, se concentraron en el monumento al General San Martín Madres de Plaza de Mayo, APDH, Hijos y Ceprodh, entre otros organismos de derechos humanos, sindicales, sociales y políticos.
De la misma forma, lo hicieron los organismos de San Salvador de Jujuy, que marcharon desde la Plaza Belgrano.
En Viedma, se hizo un acto en la Plaza San Martín de la ciudad rionegrina en repudio al fallo de la Corte.
Los organismos se manifestaron también en la ex plaza Vélez Sarsfield de la ciudad de Córdoba y marcharon hasta los Tribunales Federales, y el Espacio por la Memoria y los Derechos Humanos de la localidad cordobesa de San Francisco hizo una marcha con antorchas hacia el Paseo de la Memoria.
En Córdoba, el Ministerio de Educación autorizó a los directores de establecimientos educativos púbicos y privados a que permitieran retirarse de las escuelas a los alumnos que desearan participar de estas marchas.
Los organismos de derechos humanos de Santa Fe realizaron una concentración de similar tenor en la Plaza del Soldado Argentino.
En la ciudad de San Luis, la APDH convocó a una concentración frente al monolito de la Memoria ubicado en la Plaza Pringles del microcentro puntano, en tanto el Observatorio Municipal hizo un acto en la Granja La Amalia, que fue un lugar utilizado para torturar y asesinar durante la dictadura militar.
En el Chaco, organismos de derechos humanos encabezaron una marcha multisectorial en la Plaza 25 de Mayo de la ciudad de Resistencia.
También en Tierra del Fuego hubo movilizaciones en repudio al fallo de la Corte; en Ushuaia, se concentraron en el centro y en la Plaza de la Memoria y en Río Grande la movilización fue en la Plaza de las Américas.
En Formosa capital, los organismos de derechos humanos y la organizaciones sindicales y políticas se manifestaron en la plaza San Martín.
Asimismo, la Multisectorial de Derechos Humanos de Entre Ríos se concentró en la Plaza 1° de Mayo de Paraná, para repudiar el fallo de la Corte.