Pero no fue el único. El Rey de España también le cambió el nombre a Borges. Mirá la trastienda de lo que pasó en el Teatro San Martín.
“Imaginemos si acá los argentinos hablásemos argentino y los peruanos, peruano, y los bolivianos, boliviano, y necesitásemos traductores para hablar con los uruguayos”.
Pero, el presidente no fue el único que cometió errores en su discurso. Por caso, la visita ilustre del Congreso de la Lengua, el rey Felipe IV, le cambió el nombre a uno de los grandes escritores argentinos.
“Para no olvidar a Jose Luis Borges”, dijo su excelencia por Jorge Luis.