El anuncio del Gobierno del traspaso a provincias deja a la deriva el oscuro panorama, partiendo de la “rentabilidad” empresaria.
Aunque no hubo detalles, lo sorpresivo del anuncio del ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, de “traspasar a las provincias los subsidios al transporte” de los que se hace cargo la gestión central, encendió múltiples alertas.
En ese sentido queda expuesto el complejo panorama, particularmente de la provincia de Córdoba, en la temática.
Gustavo Mira, vicepresidente de la Federación de Empresarios del Transporte Automotor de Pasajeros (FETAP), ubicó casi en los treinta pesos el costo del boleto en la ciudad capital, en caso de que se produzca la quita total de subsidios, y a sabiendas de que “las tarifas están desactualizadas”.
En diálogo, dijo que sería “catastrófico” realizar el proceso “de un día para el otro”, ubicando en trescientos cuarenta millones de pesos mensuales el monto que envía la Nación, totalizando cuatro mil millones al año.
El dinero cubre los servicios urbanos en las principales localidades, aunque también en los viajes interurbanos.
“Las palabras (de Dujovne) no fueron claras pero generan preocupación. En Córdoba capital el subsidio cubre doce pesos, entre el gasoil y dinero en efectivo”, afirmó Mira.